Hoy continúo agradeciendo a Dios por mantenerme vivo, el
dejar de llorar por los errores cometidos no es fácil y más cuando pierdes a
alguien que considerabas esencial en tu vida. La vida sigue sin importa como
estemos anímicamente, el reloj sigue avanzando, y el tiempo está pasando, ya
llore mucho… No quiere decir que no tenga ganas de llorar otra vez, pero sé que
hay gente que depende de mí y ocupan que este bien para mí y para ellos.
Admiro a la gente que se mantiene de pie, aun cuando su
entorno se está desmoronando, por la misma situación en que vivía no me di
cuenta que me estaba rodeando de gente con tristeza igual que yo, y la gente
que vive feliz te empieza a sacar la vuelta porque nunca estas de buen ánimo… Intento
estar de mejor humor para rodearme otra vez de gente optimista, feliz, que crea
que todo futuro es mejor que el pasado…
Aprecio el vivir el presente, todavía no estoy bien, pero
estoy luchando por sentirme mejor, buscando nuevas oportunidades, planteándome metas
a corto plazo, y que sean alcanzables, ya que si no lo son tenderé a frustrarme
y perder el poco animo que estoy logrando tener. Otra vez esperemos que Dios
nos guie.
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