Lo más fácil era decir adiós, te había hecho sufrir y me
estabas haciendo sufrir… nos dañábamos, me aleje de ti y te alejaste de mí, lo
que viví sin estar a tu lado me hizo recapacitar y poner la fe en que algún día
me volvieras a amar.
Hoy todo parece indicar que mis rezos fueron escuchados y
empiezas por querer regresar conmigo, no te pregunto qué hiciste porque si tú
me lo preguntas a mí, te darás cuenta que la volví a regar sin estar a tu lado.
Dejemos el pasado donde va, e iniciemos solo viendo hacia el
frente.